miércoles, 17 de marzo de 2010

FALTAN 11 DÍAS PARA MARTES SANTO

EVANGELIO DEL MARTES SANTO

Jesús, profundamente conmovido, dijo: "Os aseguro que uno de vosotros me va a entregar". Los discípulos se miraron unos a otros perplejos, por no saber de quién lo decís. Uno de llos, el que Jesús tanto amaba, estaba reclinado a la mesa junto a su pecho. Simón Pedro le hizo señas para que averiguase por quién lo decía. Entonces él, apoyándose en el pecho de Jesús, le preguntó: "Señor, ¿quién es?". Le contestó Jesús: "Aquel a quien yo le dé este trozo de pan untado". Y, untando el pan, se lo dio a Judas, hijo de Simón el Iscariote. Detrás del pan, entró en él Satanás. Entonces Jesús le dijo: "Lo que tienes que hacer hazlo enseguida". Ninguno de los comensales entendió a qué se refería. Como Judas guardaba la bolsa, algunos suponían que Jesús le encargaba comprar lo necesario para la fiesta o dar algo a los pobres. Judas, después de tomar el pan, salió inmediatamente. Era la noche.

Cuando salió, dijo Jesús: "Ahora es glorificado el Hijo del hombre, y Dios es glorificado en él. Si Dios es glorificado en él, también Dios lo glorificará en sí mismo: pronto lo glorificará. Hijos míos, me queda poco de estar con vosotros. Me buscaréis, pero lo que dije a los judíos os lo digo ahora a vosotros: "Donde yo voy, vosotros no podeís ir".

Simón Pedro le dijo: "Señor, ¿a dónde va?". Jesús le respondió: "Adonde yo voy no me puedes acompañar ahora, me acompañarás más tarde". Pedro replicó: "Señor, ¿por qué no puedo acompañarte ahora? Daré mi vida por ti". Jesús le contestó: "¿Con qué darás tu vida por mí? Te aseguro que no cantará el gallo antes que me hayas negado tres veces".


Juan 13, 21-33.36-38


No hay comentarios:

Publicar un comentario